Reseña Crítica de El Último Elvis (The Last Elvis): Honesto Relato de Obsesión con Excelente Música (LAFF) La historia sigue a Carlos Gutiérrez, un imitador de Elvis que se cree el mismísimo Rey del Rock. A su diaria lucha con la realidad de un trabajo frustrante y la burla de muchos, se le suma la responsabilidad de ser una figura paterna para su pequeña hija después de una inesperada tragedia. El título da la idea de que va a ser una película ambiciosa, genera expectativa de que algo grande hay detrás de El Último Elvis, si se tiene en cuenta lo que representa Elvis aún hoy y las millones de vidas que tocó con su arte. Si bien la cinta contiene música dada a conocer por el legendario cantante, aspira más bien a mostrar una realidad humana desde la óptica de su personaje principal. Gutiérrez es alguien tan interesante y especial, como ordinario y disfuncional al mismo tiempo. Este fanático vive dentro de una vestimenta de obsesión tan intensa y centellante como el mejor de sus trajes de Elvis. Desde este punto de vista, y tal vez una de las cosas más meritorias del filme, es que por aquéllas mismas características, podría no tener el trasfondo de Elvis y su música, y aún así podemos conectar con el personaje y el viaje de su vida. Un guión que en gran parte tiene esa sencillez de historia minimalista, donde las cosas simples adquieren importancia y donde mucho se dice sin palabras. Son esos momentos en que vemos al protagonista a solas los que dejan entrever una realidad más compleja. Como espectadores, nos quedamos buena parte de la película especulando qué tanto de lo que vemos es “real”, por oposición a una realidad construida a partir de su sueños, frustraciones, deseos y obsesiones. Sin contar hacer gala de grandes diálogos, un poco tal vez, porque está impregnada de esa parquedad y monotonía de su protagonista, tiene algunas líneas que definen el mensaje de la película y con las cuales todos nos podemos identificar. Como cuando Carlos le dice a su hija algo como “Los que no siguen sus sueños no pueden ser felices”. Es de destacar la gran actuación del debutante John McInerny en el rol principal. Su voz y carisma contribuyen a que empaticemos con un cuestionable personaje. Aunque no nos gusten ciertos aspectos de su personalidad o no compartamos sus decisiones, aceptamos sus contradicciones y respetamos su elección de vida. Melancólica pero con destellos de luz a la vez, sobre todo cuando se enciende la voz de este imitador de Elvis, tan privilegiada como la del difunto imitado. The Last Elvis es una película donde el drama, la comedia y la música se unen para crear una historia de obsesión y coraje que le hace honor a su nombre. El escritor y director Armando Bo, realizó una digna representante de Argentina para competir por una nominación al Oscar como Mejor Película Extranjera. -Reseña Crítica de The Last Elvis escrita por Miss Marple. Mira aquí nuestra exclusiva videoentrevista a Bo en el Los Angeles Film Festival. ¡Gracias por compartir este artículo de DesdeHollywood.com en Facebook y Twitter!
