Reseña Crítica de G.I. Joe: Retaliation 3D: Un ‘Boom!’ pasajero (El Contraataque/La Venganza) A las películas basadas en las propiedades de Hasbro sólo puede pedírseles que estimulen nuestros sentidos sin insultar demasiado el intelecto. Para esos estándares G.I. Joe: Retaliation es un éxito: Muchas secuencias de destrucciones masivas con cuerpos y vehículos colisionando; menos personajes y situaciones idióticas que en Transformers. Los 9 meses que tardó la postergación del estreno para convertirla a 3D dieron sus frutos. El efecto tridimensional es notorio de principio a fin, especialmente por la manera en que el director Jon Chu eligió filmarla. La promocionada secuencia con ninjas columpiándose en heladas montañas es sumamente novedosa y efectiva. Sólo por esos minutos vale la pena pagar más y verla con los lentes negros. Hay una buena mezcla de acción sucia/realista con otras estilizadas/computarizadas. La segunda misión de los Joe tomando control del armamento nuclear de Pakistán es un ejemplo de la primera clase, con peleas y balaceras que provocan adrenalina. Luego se descansan demasiado en las armas de fuego, lo cual es un desperdicio al tener gente talentosa en artes marciales y colosos como The Rock. La historia de G.I. Joe: Retaliation es bastante simple, con los chicos malos en control de la Casa Blanca y un puñado de los héroes (sobrevivientes de un letal ataque) luchando contra las revitalizadas fuerzas Cobra. Aunque por momentos intenta ser inteligente, complicándose sin necesidad con largas explicaciones y respuestas bastante tontas. Como cuando “descubren” que el Presidente es un impostor, raptan a un funcionario para infiltrarse, y justifican el cambio de bando de Storm Shadow. Todo lo que sucede en Asia se siente desconectado con el resto. Como si la película realizara cortes para mostrar otra historia que no tiene nada que ver con lo anterior. El rapero RZA (The Man with the Iron Fists) en una pagoda como el Maestro Ciego (sí, ese el nombre del personaje) parece salido de una parodia del cine Grindhouse de los setentas. Esto es lo más cercano a una jaqueca “transformeriana” insulta-inteligencias. Pero lo peor en lo narrativo fue decidir matar a un personaje que en el comienzo crea junto a Dwayne Johnson una dinámica divertida y humana. Su repentina partida saca de balance lo prometedor que se había construido hasta ese punto. Los rumores surgidos luego del cambio de fecha de estreno apuntaban una expansión del mencionado rol, pero lamentablemente no fue el caso. Los chicos buenos tienen solamente la chispa de Johnson para energizarnos, ya que D.J. Cotrona y Adrianne Palicki no contagian demasiado. Bruce Willis hace un par de chistes, dispara una ametralladora y mira con ojos entreabiertos, ni más ni menos. Los villanos tienen personajes más jugosos, con Jonathan Pryce y Walton Goggins sacándoles provecho a sus casi comediantes malvados con líneas retorcidas de humor negro. Por momentos muy ridícula para los adultos y en otros demasiado violenta para los niños, G.I. Joe: Retaliation es un espectáculo en 3D saturado de estímulos visuales y auditivos que jamás aburre. Un ‘boom!’ que sacude sin dejar secuelas. G.I. Joe: La Venganza aniquiló la competencia desde el 28 de Marzo (fecha de estreno en Estados Unidos). Comparte y opina ¿Estás de acuerdo con esta reseña crítica de G.I. Joe: El Contraataque?