Reseña Crítica de ‘Piratas del Caribe 4’: Mareas Menos Extrañas y Aguas Poco Misteriosas Cuando una trilogía recauda 2.6 mil millones de dólares en la taquilla global (y millones más en mercadotecnia, videojuegos, etc.) es inevitable que Hollywood quiera intentar una cuarta vez. Antes de hablar de la misma quiero aclarar que no me considero un fan de la serie aunque he visto todas en el cine. Al igual que con las de Harry Potter, días después de verlas se me hacía difícil recordar lo sucedido. Los últimas dos entregas me resultaron confusas y sobrecargadas de personajes, historias paralelas y sobretodo minutos de duración. El propio Jhonny Depp confesó que ni el ni el director Gorve Verbinski sabían exactamente lo que estaba pasando mientras se filmaban la segunda y la tercera. Aunque dice no haberlas visto (¿se dormiría una siesta en las premiers?), Depp sintió que para la cuarta debía -además de cobrar alrededor de 30 millones-involucrarse más en la historia para corregir el rumbo. Jack Sparrow va a Londres para rescatar a su “fiel” secuaz Gibbs pero después de ser perseguido por las tropas reales termina siendo secuestrado por los hombres de Barba Negra (Ian McShane). Jack debe guiarlo a la Fuente de la Juventud para salvar su pellejo y redimirse ante Angélica (Penélope Cruz), hija del temerario pirata a la cual Sparrow le rompió el corazón. Pero a la carrera por la mítica fuente se suman las tropas británicas capitaneadas por Barbossa (Geoffrey Rush) y también la flota española. La primera mitad de la película es tremendamente dinámica y entretenida. Una seguidilla de “set-pieces” incluyen una vertiginosa persecución por las calles londinenses, una prolongada pelea con espadas y un intento de amotinamiento en el barco de Barba Negra. La escena más impactante y original es cuando intentan capturar a una sirena. Estas criaturas mitológicas son tan sexys como aterradoras, sobretodo en la penumbra de la noche. Las tomas debajo del agua donde se ve apenas las siluetas de estos seres son fantásticas. Gran diferencia de tono con el ataque del Kraken en la segunda, a plena luz del día para lucir el CGI. El director Rob Marshall demostró que es capaz de coreografiar grandes escenas de acción y no solamente musicales como lo hizo en ‘Chicago’ y ‘9’. En la segunda mitad la cosa cae un poco y comienzan a ser evidentes algunas falencias. La atención dedicada al misionero y la sirena es tiempo perdido ya que su supuesto amor no es creíble y sus personajes más que olvidables. Esa devoción profesada por Angélica hacia su padre nos hace difícil conectar con el personaje de Cruz ya que nada en la película justifica su interés por salvar al despiadado Barba Negra. El final carece de toda sorpresa ya que la famosa profecía descrita al comienzo y las reglas para que funcione la fuente de la eterna juventud son telegramas directos al espectador de lo que vendrá después. La manera en que concluye la relación entre Angélica y Jack se siente forzada para acomodar mejor las cosas para la próxima de la serie. ¿Tanto sacrificio para terminar así? Las actuaciones de grandes como Rush, McShane y Depp vienen a suplir con la carisma propia de los actores lo caricaturesco de sus personajes. Cruz hace un trabajo correcto pero nadie la va a extrañar en Piratas del Caribe 5. Con respecto al humor sucedió lo mismo que con ‘Sherlock Holmes’ donde la agencia de marketing quemó los mejores chistes en los trailers. En lo técnico se notó la ausencia de presupuesto en cantidad de tomas de efectos especiales. Pero cuando se utilizan se ven muy reales y también se aprecia la cantidad de efectos prácticos “a la antigua”. Aunque fue filmada con cámaras 3D, la cantidad de escenas de acción en la penumbra de la noche provocó que muchos se quejaran al utilizar los lentes. Por ello no gasté el dinero extra de la entrada pero en la proyección 2D también se hizo difícil distinguir exactamente lo que pasaba en dichas escenas. En resumen, esta nueva entrega mejora al centrarse en un solo hilo conductor y un puñado de personajes, dedicándole más tiempo de pantalla a Jack. Aunque si la intención era refrescar y darle un nuevo inicio a la franquicia los resultados fueron mixtos. Sparrow se hace bastante predecible a estas alturas y los nuevos personajes vinieron a ocupar huecos dejados por otros en las tres primeras. Por momentos nos hizo recordar a otra-mucho peor- cuarta parte, la de Indiana Jones, cuando aparecía la musiquita principal como si alguien apretara un botón para recordarnos los mejores tiempos de la serie. A ver si después de ‘Dark Shadows’ y ‘The Lone Ranger’ podemos extrañar de nuevo a Jack como para seguirlo en una nueva aventura. -Reseña Crítica de ‘Piratas del Caribe 4’ escrita por Néstor “Argh!” Bentancor. Mantente conectado con DesdeHollywood.com y las noticias del cine en Facebook y Twitter.
